domingo, 7 de agosto de 2016

Acontecimientos Lamentables

Hebe de Bonafini, desde la ciudad de Mar del Plata, y junto a varios militantes que la acompañaban desde la Capital Federal dio un mensaje lamentable y distorsivo para la república, porque incitó a los ciudadanos al desacato nacional para que salieran a tomar las calles y espacios públicos. Verdaderamente una vergüenza y un bochorno que hace sentir incomodo a gran parte del país., tanto es así que manifestó desde Mar del Plata “…hay que salir a la calle” incitando así al reclamo violento y a la desobediencia generalizada, y trazó como objetivo reformar la constitución. Sus discursos escandalosos llevan la verborragia de gobernantes dictatoriales e increíblemente tiene gente que la acompaña y aplaude su desobediencia y su desacato… “está todo bien porque lo dijo Hebe” No se halla una explicación racionalmente entendible ante una conducta tan desubicada, irrespetuosa y escandalosa, entendiendo que solamente con su accionar busca victimizarse para ubicarse en el primer plano de las noticias y sentirse vigente e intentar disimular las graves causas de corrupción de la que es acusada públicamente e indicando constantemente: “ yo hago lo que quiero y digo lo que quiero”. Cuánta arrogancia, soberbia y falta de humildad. Esta señora junto a todos los que aprueban su accionar, están equivocados, porque ha cometido, o a permito que se cometan ante el programa de “Sueños Compartidos” situaciones muy anormales con el manejo de los fondos asignados, en donde según esas acusaciones, indican que se estafaron a una gran cantidad de personas y al mismo estado nacional por el programa de construcción de viviendas, muchas de las cuales no se terminaron y otras no se realizaron, pese haberse cobrado las mismas. Nada se acusa a Hebe de Bonafini sobre su labor por los derechos humanos, en donde con el inmenso dolor que como madre sufrió por la pérdida de sus hijos en manos del terrorismo de estado, ganó su reconocido merito por gran parte de la sociedad argentina y también en gran medida en el orden internacional, pero todo esto no le da ningún derecho a no respetar a la justicia y pensar que las leyes a ella no la alcanzan sintiéndose dueña absoluta de manejarse con total impunidad. Esto es una situación lamentable porque la señora Bonafini “no declaró” ante el Juez que la convocó y manifiesta públicamente su rebeldía indicando “que no va a declarar, ni concurrirá al despacho del Juez”; por lo tanto ella lo único que se adviene de hacer es recibir al magistrado en la Casa de Las Madres y aparentemente el Juez acepta esta propuesta, la cual se convierte en intransigente y vergonzosa, además de convertirse, si se concreta, en un pésimo ejemplo y horrible precedente, quedando claro para la sociedad que esta persona no es igual ante la ley y hace lo que quiere. Es una incorrección absoluta que la justicia acepte estas condiciones que trata de imponer la acusada. Vergüenza también se siente al ver como un grupo de ex funcionarios impresentables, responsables directos de la situación caótica de nuestra nación, apoyan a la señora en su rebeldía, dejando claro su accionar y demuestran verdaderamente lo que son estos hombres, que apoyan a la delincuencia y al no respeto a la justicia ni a las leyes, luego son los mismos que hablan de democracia. El colmo de ser caraduras e inmorales. No se debe apoyar la desobediencia, todo el mundo debe dar cuenta de sus actos ante la justicia y si esto no se cumple el país se desarma ¿Hay miles de argentinos que buscaran eso? En el medio de todo este caos y ante tanta expectativa la ex presidenta Cristina Fernández la llama por teléfono a Hebe, y comenta la misma: “Cristina me llamó varias veces, ella se preocupaba por mi vida, tenía mucho miedo de que me llevaran y me pasara algo, que me descompusiera, me muriera. Me decía cuídate, cuídate”. Lástima que la ex presidente no la llamó cuando cometía malversaciones con la plata de todos los argentinos, parece que en este caso era “muy valiente y no sentía miedo”. (Cuánta hipocresía existe en los ex funcionarios). Ahora parece que todos los atropellos que le hacemos a los ciudadanos están bien, robamos mientras somos gobierno, total si nos acusan, como ahora, mencionamos que somos “perseguidos políticos” y una interesante cantidad de ex funcionarios y parte incauta de la sociedad apoyaran incondicionalmente nuestros actos tramposos sin importarle un comino la republica ni el porvenir de la patria ni la honestidad de millones de argentinos. Realmente ver esto da mucha pena y es increíble sentir el nivel de tanta bajeza y desorganización en la que hemos caído. Con este estado de cosas la organización de la república está con un riesgo de degradación en crecimiento; personas inadaptadas son desobedientes de las normas, y muchas de ellas son corruptas, las que pretenden parapetarse con total atropello sobre los demás ciudadanos y hacer creer al resto de la sociedad que lo que hacen está bien. Pero verdaderamente no está bien, porque están acusados de haber cometido actos delictivos y por eso es que deben presentarse ante la justicia todas las veces que esta lo requiera para aclarar los mismos. Eso es su deber de ciudadano y la justicia argentina se debe poner de pie, obrar con ecuanimidad y con firmeza para consolidar la seriedad de nuestra nación y no permitir que personajes prepotentes quieran imponer derechos que nunca les ha correspondido. Walter Bonetto 7 de julio de 2016 http://walterbonettoescritor.blogspot.com walterbonettoescritor@gmail.com Twiter: @walterbonetto Página de Facebook de Walter Bonetto

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por tu comentario