lunes, 25 de enero de 2021

 

¡DALE QUE VA!

Para nuestro presidente el gobernador de Formosa “es un ejemplo” y El se siente feliz de encontrarse   en su provincia; lo abraza emocionadamente y lo saluda sin barbijo. “Todo está bien”. Mientras tanto  esa gestión provincial  se encuentra altamente denunciada por el avasallamiento a los derechos humanos  que les duele a las personas humildes y trabajadoras totalmente desprotegidas.

 Esta denuncia, en muchos aspectos, de hecho resultan escandalosas, y sin embargo la política oficial trata por todos los medios de que pasen inadvertidas, sin existir jueces que se ocupen del tema. Ahora se ha sumado el manejo inconcebible de un Centro De Aislamiento por la actual pandemia, en donde no se respetan normas básicas para preservar la salud de la población.  

Es increíble que nuestro jefe de estado avale a la injusticia y al atropello. Lo mismo ocurre  cuando adula a un sindicalista argentino cuestionado por corrupción, poniéndolo de modelo como “gran luchador”. Son estas situaciones que desestabilizan el pensamiento de millones de argentinos que queremos a una patria honesta y con justicia, pero el ejemplo de nuestros gobernantes dista mucho de lo deseado. ARGENTINA PRECISA DESPERTAR A LA SENSATEZ.