Opinion: Alianzas peligrosas

                                                             
    No se observa claramente cuáles son  las intenciones reales de nuestra nación en materia internacional y no siempre obra como moderada ni prudente en este aspecto. Es que Argentina ha tenido en su trayectoria histórica vaivenes  propios de una nación tan insegura como impredecible. La actual polémica por el manejo de las negociaciones y un acta de acuerdo con Irán por el tema de los atentados a la mutual Judía y a la embajada de Israel,  pone al rojo vivo enormes diferencias políticas y sociales por las tremendas heridas causadas por esos atentados y el dolor de los familiares por los seres perdidos, mientras que   grandes sospechas de manejos secretos   trascienden la frontera de lo ético en el campo de las relaciones internacionales.
    Una de las grandes posibilidades en el orden de las negociaciones actuales es que la república islámica de Irán  busque intensificar la relación   con Argentina  y encontrar la oportunidad adecuada para terminar obteniendo tecnología que este país posee desde hace décadas, relacionadas con la actividad misilística que culminó en julio de 1990 cuando el misil Cóndor II argentino fue desmantelado por grandes presiones internacionales  y de algunos países de América del norte y del sur.
      A partir del año 2009 y según lo publicado en distintos medios de prensa nacional y extranjera, la república Argentina trabaja para revivir el Condor II, aunque ahora con otro nombre, siendo los responsables de este “renacer”  el Ministerio de Defensa y el de Planificación y hasta la misma Presidenta  anunció esta reactivación  en Julio de 2011, durante su participación en la cena de las Fuerzas Armadas.
     Ahora bien, esta reactivación no viene sola, sino que está acompañada celosamente de la mano de Venezuela y la república de Irán en un programa de transferencia e intercambio de tecnología que aun Argentina mantiene en su poder después de la ya citada desmantelación del importante misil y que son altamente necesarias para esos países para el desarrollo de sus armamentos. Es así como se puede pensar que la aparente predisposición de Irán de “negociar” con nuestro país  podría tener como objetivo final lograr capacidades científicas en materia coheteríl que a ellos les están faltando y que ya Argentina estaría transfiriendo componentes menores quizás disimulados como "elementos de griferias", según lo manifestó el mismo Canciller Argentino Héctor Timerman,  días pasado en el Congreso de la Nación, "que era grifería lo que se entregaba Irán", conceptos estos que son bastantes sospechosos.  ¿ Tendrá necesidad Irán de comprar o requerir griferia de Argentina?

    Todo esto es un carrusel de situaciones más peligrosas que incomodas y nos hacen pensar que son muchos los países del mundo que cada vez trabajan menos para la paz de lo que esa paz precisa para sostenerse y así se contribuye en seguir condenado a la humanidad porque cada día se arman más para la guerra con la excusa de que “deben defenderse” y el vecino tiene mucho.
    Es posible que sean muchas las presiones que vuelvan a nuestro país por entrar nuevamente en un  club prohibido y es posible que nuestro país no mida las consecuencias. Ya demasiado dolores de cabeza dio el misil Cóndor a los argentinos y no porque haya estado mal el Cóndor  si al final era una tecnología misilística dual, cuyo objetivo primordial era “colocar satélites en órbitas baja de la tierra”, que se aplicarían a la meteorología y las comunicaciones.
     Argentina venía trabajando desde los años sesenta y haciendo lanzamientos de sus primeros vehículos con fines pacifico, ahora bien, como en el caso del cóndor era dual, podía llevar una ojiva nuclear y colocarla a mil kilómetros de distancia volando a seis mil kilómetros por hora. Eso fue un chiche codiciado por muchos países del mundo que no eran capaces de lograr lo que Argentina había logrado, y de hecho algunos habían financiado aquel proyecto, y se comprometieron con el mismo,  dentro de ellos Irán, pero todo quedó inconcluso cuando el cóndor fue abatido.
   Hoy los familiares de los muertos por los atentados aun lloran a sus seres queridos y más que nunca piden justicia. Es posible que el gobierno argentino maneje a trastienda una alianza muy peligrosa que nos hará pelear con medio mundo y  no calmará en absoluto el dolor de los desesperados,  mientras que el mismo Irán  podrá intentar buenas relaciones, continuar "comprando grifería en Argentina" y obtener parte del cóndor abatido desde más de veinte años.


Walter Bonetto
5 de marzo 2013
Periodico La Ribera, marzo 2013
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